Toda madre vive para sus hijos y hará todo lo posible para brindarles lo que necesitan en la vida y una infancia feliz. No es diferente con las madres perras, especialmente aquellas que deben valerse por sí mismas y por sus bebés.

Cuando una mujer empezó a ver una hembra de Pit Bull cerca de su casa en Chattanooga, Tennessee, no tenía idea de la historia de vida de este perro. Aunque la alimentó varias veces, esta pittie en realidad anhelaba algo más.

Después de darse cuenta de lo que era, su corazón lloró por este perro y supo que tenía que ayudarla.

Una mujer se dio cuenta de los problemas del perro cuando la vio alimentando a varios cachorros hambrientos cerca de la casa. Sin pensarlo mucho, consiguió un lugar cómodo para ellos, pero no pudo hacer más que eso.

Sin embargo, luego grabó un video de esta madre amamantando a sus cachorros y se lo envió a una persona que pensó que podría ayudarla. Cuando vio el mensaje, esta rescatista de gran corazón no esperó ni un minuto sino que inmediatamente corrió hacia ese lugar.

Después de que Audray Luck, la fundadora de Luck’s Rescue, llegara a Chattanooga, Tennessee, la madre perra saltó instantáneamente a su regazo. Independientemente de lo que pasó, no se quitó la sonrisa de su rostro, por lo que Luck decidió llamarla Happy .

Happy vivía en un hogar cálido, pero sus dueños la abandonaron, por lo que tuvo que valerse por sí misma. Poco después, Happy dio a luz a siete cachorros que ella misma cuidó hasta que los llevó a una casa vecina donde los encontró esta mujer.

“Happy sólo quería asegurarse de que recibieran suficiente comida y de que estuvieran sanos”, dijo Luck a Cuddle Buddies.

Conmovida por su desafortunado destino, Luck decidió hacer todo lo posible para que el futuro de esta madre perra y sus hijos fuera más brillante.

La suerte actuó de inmediato y rápidamente encontró un hogar de acogida para los cachorros mientras la madre se quedaba con ella un poco más.

“Happy estaba un poco preocupado. Ella estaba como “¿Dónde están mis bebés?””, dijo Luck.

Pronto, también encontró un hogar de acogida para Happy . Allí, al instante la colmaron de amor y afecto, lo que la ayudó a superar todos estos momentos turbulentos de la vida.

Su salvador, Luck, pronto la visitó nuevamente y le trajo la más hermosa sorpresa que le devolvió la reconocible sonrisa a su rostro. Esos eran sus bebés, y estaba encantada cuando los vio una vez más.

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Sin embargo, en un momento dado, la madre y sus hijos tuvieron que tomar caminos separados y encontrar la felicidad en sus nuevas vidas. Por suerte, esta madre perra, a pesar de todo lo que había pasado, todavía tenía suficiente amor en su corazón.

“Ella ha pasado por muchas cosas en su vida y, sin embargo, todavía está dispuesta a dar mucho amor”, concluyó felizmente Luck.

Happy lo demostró cada día en su nueva casa de acogida, donde, además de disfrutar cada momento con su familia, también encontró a su mejor amiga conejita de la que no se separó.

La vida finalmente volvió a ser una bendición, y solo un alma buena la separó de su final más feliz. Así como la mujer de buen corazón del inicio de esta historia logró encontrarla, su belleza seguramente será reconocida por alguien que le dará felicidad para siempre.

No lo dudamos en absoluto.